LOS JUEGOS OLÍMPICOS DE MONTREAL DE 1976

 LA OLIMPIADA BILINGÜE

 

Por cuarta vez la llamada olímpica, regresó al Continente Americano, y aunque es cierto que los Juegos de Montreal fueron un éxito total en su faceta deportiva, no es menos cierto, que el económico y el político dejaron mucho que desear.

 

Canadá, que ya había solicitado en tres ocasiones, ser la sede organizadora de unos Juegos Olímpicos, pudo ver cumplidos finalmente sus sueños, de que la llama traída desde Olimpia, iluminara el cielo de la bella nación canadiense.

 

La primera oportunidad, fue con motivo de los Juegos que debían celebrase el año 1944, que ganó Londres, pero que por imperativos de “II Guerra Mundial”, estos no pudieron disputarse. Lo intentó otra vez para los de Melbourne de 1956, pero la suerte no le acompañó al ser eliminada.

 

Más tarde, después de 16 años de espera, lo volvería a intentar para los de Munich de 1972, desde donde nuevamente regresó a su país sin el objetivo previsto.

 

No obstante estos reveses, volvería a postularse para los del año 1976, donde llegó a la votación final conjuntamente con Moscú y Los Ángeles. En la primera votación, la capital rusa ganó por escaso margen a Montreal, quedando eliminada la ciudad de Los Ángeles, que ya los había organizado anteriormente en 1932, pero pasando algunos votos de la ciudad angelina a Montreal, que finalmente logró el premio a su perseverancia para organizarlos.

 

EL GRAN DIA DE LA INAUGURACIÓN DE LOS JUEGOS

 

Este día fue el 17 de julio La participación fue bastante inferior a los anteriores de Munich de 1972, desfilando un total de 6028 deportistas entre ellos 1247 mujeres representando a 92 países. Participaron por primera vez, los países de Andorra, Antigua y Barbuda, Islas Caimán y Papua Nueva Guinea, Camerún, Egipto y Marruecos.

 

La Ceremonia Inaugural fue presidida por la Reina Isabel II, en su condición de miembro de la Commomwealth, junto con las autoridades del Gobierno y del Comité Olímpico, la cual dio por abiertos los Juegos, hablando en lengua inglesa y francesa.

 

El Juramento de los Deportistas, lo realizó el deportista practicante de halterofilia Pierre Saint-Jean, siendo los portadores de la antorcha hasta el pebetero, dos jóvenes atletas, Stéphane Prèfontaine de 16 años representando a la parte francófona, y Sandra Hendersen de 15 años que lo hacía por la parte anglófona, los cuales corriendo juntos, la depositarían en el pebetero para iluminar esta gran cita del olimpismo, que simbolizaba a la vez, la unión de los dos pueblos fundadores de Canadá.

 

 Un aspecto del estadio, en el desfile de los participantes el día 17 de julio de 1976, sin el techo móvil
 Un aspecto del estadio, en el desfile de los participantes el día 17 de julio de 1976, sin el techo móvil

Esta escena del encendido, llevó aparejada su historia de amor entre estos dos relevistas, que años más tarde contraerían matrimonio.

 

La llama encendida en las ruinas de Hero en Olimpia con su tradicional y clásica Ceremonia el día 13 de julio, sería entregada por un atleta griego a otro canadiense, que lo portaría mediante relevos hasta Atenas. Desde la capital helena, el fuego sería transferido a un sensor, que mediante impulsos eléctricos vía satelital, la haría llegar hasta Canadá, donde mediante rayos láser, volvería a ser encendida, para continuar los relevos a pié por todo el país hasta llegar al pebetero.

 

                                     DONDE COMIENZA LA PARTE OSCURA DE LOS JUEGOS

Por un lado el gobierno canadiense, como así mismo el estado de Québec, dejaron muy claro que no contribuirían en financiar el coste de los Juegos. No obstante el Presidente del Gobierno Pierre Trudeau, que en principio, no quería asumir esta responsabilidad, decidió finalmente conceder una subvención de 250.000 millones de dólares, cantidad a todas luces insuficiente, para garantizar la construcción de las nuevas sedes, que debían acoger los distintos deportes.

 

La antorcha mas tecnificada de la historia
La antorcha mas tecnificada de la historia

Esta decisión no desanimó al Alcalde de la ciudad, Jean Drapeau que incansable en su empeñó por organizar este acontecimiento y consciente de que esta ayuda no cubría ni de mucho el coste total de las obras, puso en marcha el proyecto.

 

Estos Juegos de Montreal, fueron un caso ruinoso, financiado en casi su totalidad por la iniciativa privada Una solución para captar recursos económicos, fue imponer impuestos sobre el precio del tabaco, el alcohol, además de una emisión de sellos y monedas, sorteos de lotería, y alguna aportación personal de ciudadanos del país.

 

La construcción del "Stade Olympique de Montreal” el buque insignia de este evento olímpico, fue dirigida por el arquitecto francés Roger Taillibert, el cual lo habilitó para una capacidad de 75.000 espectadores. Una huelga laboral de los trabajadores en la fase final, exigiendo un aumento salarial que oscilaba cerca de los 900 dólares semanales, provocó un considerable retraso en las obras, por lo que el estadio quedó a medio construir.

 

El proyecto contemplaba, la construcción una modernísima torre metálica inclinada, de gran tonelaje de 175 metros de altura, capaz para sostener el techo móvil que debía cubrir todo el estadio, para salvaguardar las pistas de competición y al público, ante los rigores del crudo periodo invernal, cuando el hielo y la nieve hacen su aparición en esta época del año, pero esta idea quedó aparcada para más adelante.

 

Una vez finalizados los Juegos, se reemprendieron los trabajos con la idea querer acondicionar el estadio para otras diferentes competiciones deportivas, como el béisbol, fútbol americano, baloncesto, fútbol clásico, jockey sobre hielo, entre otros eventos, pero esta intención se vino abajo al comprobar que la estructura inicial no era lo suficiente sólida, para sostener el enorme peso del techo móvil, que lentamente se iba desquebrajando hasta caer al suelo enormes trozos de la misma, por lo que se requería otra nueva una intervención construcción.

 

El moderno estadio y su torre inclinada, una década después de los Juegos
El moderno estadio y su torre inclinada, una década después de los Juegos

Esta torre que fue considerada en aquel momento, como la más alta del mundo, se construyó en el año1982 y finalizo en 1987

 

Pero el desastre final vino como queda dicho, con las obras ya finalizadas, cuando la enorme torre pocos meses más tarde, se vino abajo y con ella los soportes que sostenían el moderno techo de fibra transparente, que no pudo aguantar todo el peso que la inestabilidad climática iba depositando sobre el mismo.

 

Esto sucedió en el preciso instante que se estaba disputando un partido de béisbol, que afortunadamente no produjo ninguna desgracia personal.

 

No sería hasta el año 2005, cuando quedarían definitivamente amortizadas todas las deudas, dado que el presupuesto inicial se quintuplico. La cantidad final llegó cerca de los 1500 millones de dólares.

 

Es obvio decir que tanto los ingenieros como los contratistas y fabricantes, fueron demandados judicialmente, por los repetidos fallos que se iban sucediendo. Este estadio fue apodado como el “Estadio de la Gran Deuda”

 

UNA VEZ MAS LA POLITICA ENTURBIA LOS JUEGOS

Como si de una cosa normal se tratará, otra vez aparecieron atisbos de las reivindicaciones políticas a cargo de algunos países africanos, que reclamaban la expulsión de la delegación de Nueva Zelanda, por el hecho de que su equipo de rugby aceptara jugar un partido con la República de Sudáfrica, contraviniendo los principios del propio COI, que excluyó al país africano por su política del apartheid. Pero inexplicablemente, el Comité Olímpico no cedió a las presiones, lo que provocó que 24 países africanos no participaran en los Juegos, regresando de inmediato a su país.

 

Otro hecho que motivó la retirada de la República de China Continental, fue el reconocimiento por parte del Gobierno canadiense, de la China Popular de Taiwán. Para suavizar el conflicto, se efectuaron negociaciones para que esta última aceptara participar solo con el nombre de Taiwán, pero sin ondear su bandera en el mástil estadio, ni escuchar su himno nacional, cosa que esta no aceptó, regresando a su país.

 

Hay que hacer constar, que después de los luctuosos sucesos de Munich-1972, el Gobierno canadiense instruyó puntualmente a 15.000 policías en previsión y protección de todo el entorno olímpico, que afortunadamente no fue amenazado por ningún signo de violencia.

 

LOS GRANDES PROTAGONISTA DE LOS JUEGOS

 Nadia Comaneci
 Nadia Comaneci

Si hubo una auténtica heroína en Montreal, esta fue sin duda, una niña rumana de 14 años de edad, que no superaba el metro y medio de estatura, llamada Nadia Comaneci, un prodigio de la gimnasia mundial.

Nunca hasta este momento los jueces otorgaron en unos Juegos, una puntuación de 10,0 cosa que ella logró alcanzar por primera vez. Esta extraordinaria puntuación, la repetiría varías veces en diferentes ejercicios, alcanzando con ello, tres medallas de oro, una de plata por equipos y un bronce en ejercicios en el suelo.

 

En la competición de halterofilia destacó una vez más el ruso Vassily Alexeyev, que en la década de 1970 alcanzó la friolera cifra de 79 plusmarcas mundiales, revalidando a la vez, su título de los Juegos Munich, en la categoría de los semipesados.

 

Otras figuras que dieron un toque de calidad, vinieron de la natación mediante brillantes actuaciones del saltador italiano Klaus Dibiasi, en las pruebas de saltos de palanca, donde dio una auténtica exhibición de sus grandes facultades alcanzando tres medallas de oro.

 

Hay que hacer constar que la natación, fue la disciplina que más plusmarcas olímpicas y mundiales, cosechó. Si hubo un nadador que destacara espectacularmente por encima de todos, se tiene que nombrar al americano “Jim” Montgomery, que en la prueba de 100 metros libres, alcanzó un récord galáctico al cubrir la distancia con el increíble crono de 49,99 rebajando por primera vez en la historia, el tope de los 50,00 seg.

 

Kornelia Ender
Kornelia Ender

En esta relación de destacados, hay que nombrar a los americanos Jhon Nader, ganador de cuatro medallas de oro y una de plata, como así mismo, a sus compatriotas Brian Goodell y Bruce Furnis que en sus diferentes especialidades, también acapararon topes olímpicos y mundiales.

 

En lo referente a las mujeres, hubo infinidad de grandes registros, que dejaron su huella en los listados de mejores marcas, pero sobresaliendo poderosamente, la figura de Kornelia Ender representante de Alemania del Este, la cual alcanzó cuatro medallas de oro con sendos récords olímpicos y mundiales, más una de plata.

 

Sobre esta gran deportista hay que señalar, que 25 minutos después de ganar los 100 metros mariposa, con récord olímpico incluido, se impuso igualmente en los 200 metros libres, con un tiempo de 1:59,26 siendo la primera nadadora en rebajar el tope de los dos minutos. Otras nadadoras destacadas fueron su compatriota Barbara Krause y la norteamericana Shirley Babashoff.

 

LA PRUEBA DEL MARATÓN

Como siempre sucede en la más clásica de todas las pruebas olímpicas, la competiciónsobre los 42.195 Km. dejó marcada su huella en la cronología de los ganadores olímpicos, al vencer contra pronóstico el alemán Waldemar Cierpinski, antiguo especialista 3000 metros obstáculos, al coronarse campeón con un tiempo de 2h.09:55,0 que rebajaba el récord olímpico por más de dos minutos.

 

Waldemar Cierpinski
Waldemar Cierpinski

En esta prueba, comandada desde un principio por el norteamericano Frank Shorte, ganador de Munich de 1971 y por el finlandés Lasse Virén, que después de sus victorias en 5000 y 10000 lisos, intentaba igualar la gesta del mítico Emil Zatopek, en los Juegos de Helsinki de 1952, donde alcanzó este triplete histórico, que todavía a día de hoy, permanece inalterable, dado que esta intención se vino abajo, al llegar en quinta posición con un tiempo de 2h.28:37,8.

 

Referente al atletismo, otro mítico atleta Víctor Saneyev de la Unión Soviética alcanzaría el oro, que añadiría a los otros dos que ganó en los Juegos de Munich y Méjico, con lo cual dejaría patente el sello de su indiscutible dominio, en las pruebas de triple salto.

 

Un caso muy gratificante fue la victoria del lanzador húngaro, Miklos Németh en jabalina, hijo del legendario Imre Németh, que en los Juegos de Londres de 1948, ganó el oro en lanzamiento de martillo.

 

El cubano Alberto Juantorena, ganando la prueba de 800 metros lisos
El cubano Alberto Juantorena, ganando la prueba de 800 metros lisos

Por primera vez en unos Juegos, un atleta ganó las pruebas de 400 y 800 metros lisos. Este hecho corrió a cargo del cubano Alberto Juantorena, apodado el “caballo cubano” que en una gran demostración de su poderío, se permitió alcanzar esta gesta que nadie ha podido aún igualar.

 

El gran gimnasta soviético Nikolay Andrianov, con cuatro medallas doradas, dos plata y una de bronce en cinco disciplinas, ratificó el dominio que siempre tuvieron los gimnastas de la Republica Soviética.

 

Otra gesta que debe conocerse se debe, a la medalla de bronce alcanzada por el boxeador de Las Bermudas, Clarence Hill en el peso semipesado, convirtiéndose en el primer habitante del país más pequeño del mundo, con solo 53.500 habitantes, en ganar una medalla olímpica.

 

Otros referentes lo protagonizó el equipo de voleibol femenino del Japón, al ganar todos los sets de todos sus partidos, en el debut de esta disciplina en una olimpiada.

 

También por primera vez en la historia, los velocistas de Estados Unidos, no estuvieron presentes en el podium de ganadores de los 100 metros lisos, una prueba que siempre dominaron totalmente.

 

Irina Szewinska
Irina Szewinska

Igualmente es de justicia nombrar, a la gran atleta polaca Irina Szewinska, que en su debut olímpico en la prueba de 400 metros lisos, ganó el oro con la gran marca de 49,29, con lo cual engrosó su ránking de medallas olímpicas, con las tres también doradas, dos de plata y dos de bronce, ganadas en los Juegos de Tokio, Méjico y Munich que suman un total de siete medallas en cinco pruebas.

 

Otra novedad, fue comenzar a controlar las drogas, el punto negro de casi todos los deportes, que desgraciadamente, tantos ríos de tinta hacen correr por todo ámbito deportivo mundial.

 

Siguiendo con las cosas curiosas, también en este evento olímpico, apareció el tramposo de turno. Se trata del esgrimista soviético Boris Omischenko, que fue descalificado al descubrirse que llevaba adosado a su cuerpo, un artilugio que le permitía registrar puntos inexistentes en el tablero.

 

Estos Juegos también tuvieron su triste y cómico personaje. Durante la Ceremonia Inaugural, irrumpió inesperadamente en el estadio un “Streaker” completamente desnudo, hasta que la policía lo detuvo, sacándolo fuera del estadio. Todavía no se sabe, a parte de la risa que provocó entre el público, cual era su verdadera reivindicación.

 

El ránking final de medallas ganadas, lo encabezó la URSS con 49, seguida de la Alemana del Este con 40 y los Estados Unidos con 34.

 

UN RECUERDO PARA EL BOXEADOR CUBANO TEÓFILO STEVENSON

Uno de los grandes héroes fue el púgil cubano Teófilo Stevenson, en la categoría de los pesos pesados, consiguiendo su 100 victoria antes del límite, que le permitió revalidar la medalla de oro, conquistado en Munich y como posteriormente lo haría, en los Juegos de Moscú de 1980, estableciendo un récord de tres medallas de oro consecutivas, que solo el húngaro Lazlo Papp en el peso medio, fue capaz de igualar.

 

Teófilo Stevenson
Teófilo Stevenson

Precisamente, en el momento de confeccionar este documento, nos llega la triste noticia de su fallecimiento, motivado por un coágulo arterial, que ya en el pasado mes de enero le dio un primer aviso. Esta triste desaparición sucedió el 12 de junio de 2012, a la edad de 60 años. Teófilo Stevenson era un auténtico ídolo en Cuba, donde siempre contó con él apoyó incondicional del líder cubano Fidel Castro, el cual era uno de sus más acérrimos admiradores.

 

Teófilo Stevenson, fue considerado en aquel momento el mejor peso pesado del mundo, aunque su condición de amateur, le impidió contrastarlo con los grandes de la época Mohamed Alí y Joe Frazier, cuando le llegaron ofertas millonarias de los grandes promotores americanos e ingleses para pasarse al profesionalismo.

 

Todos los entendidos calificaron unánimemente, que sería sin duda la pelea del siglo, pero él siempre las rechazó todas, alegando que prefería el amor de ocho millones de cubanos, que no un millón de dólares.

 

LA PARTICIPACIÓN ESPAÑOLA

La delegación española presente en estos Juegos, estuvo integrada por 115 deportistas entre ellos 11 mujeres, que tuvieron una notable actuación, alcanzando dos medallas de plata y diez “Diplomas Olímpicos” cosa esta última, que se venía repitiendo desde los Juegos de Londres de 1948 para los seis primeros clasificados, pero que posteriormente se modificaría en los Juegos de Los Ángeles de 1984, ampliándolo hasta los ocho primeros clasificados, que actualmente prevalecen.

 

El abanderado de la selección española, fue el boxeador asturiano Enrique Rodríguez Cal, medalla de plata en los juegos de Munich de 1972.

 

En las pruebas de mar abierto, el equipo de vela en la clase de 470, compuesto por Antonio Gorostegui y Pedro Lluis Millet, ganaron una de las dos medallas de plata, siendo la otra la correspondiente a la prueba de piragüismo de K4 1000 m., donde Herminio Menéndez, José Ramón López, José María Esteban y Luis Gregorio Ramos, completaron estos destacados lugares de honor, accediendo al podium de ganadores.

 

En cuanto a los merecedores del “Diploma Olímpico”, este lo consiguieron Mariano Haro, sexto clasificado en la prueba de 10.000 lisos, el yudoca José Luis de Frutos, en la categoría de 80 kilos,.el equipo de hípica en la prueba de saltos por equipos, formado por Luis Alvarez, JoséMaría Rosillo, Eduardo Amorós, y Alfonso Segura Completaron este cuadro de honor, los componentes de los equipos de piragüismo en las categorías de K2100 m., K 2500m. y K 1500m. y el equipo de Hockey sobre hierba.

 

Carmen Valero
Carmen Valero

El equipo de atletismo estuvo conformado 16 hombres y una mujer, Carmen Valero, que participando en 800 y 1500 metros, se convirtió en la primera atleta española participante en unos Juegos Olímpicos.

 

En los hombres nuestros representantes fueron, Antonio Campos, octavo en la final de 3000 obstáculos, Andrés Ballbé en 800 m. Antonio Baños, Santiago Manguán, Agustín Fernández en el  marathón, Rafael Blanquer en longitud, Juan Carrasco y Francisco Martín Morillas ambos en altura, Fernando Cerrada en 5000 m Ramón Cid en triple salto, José Luis Bernal en 10.000 metros y José Luis Sánchez Paraíso, Francisco J. García López, Luis J. Sarria y Javier Martinez, en los relevos de 4 x 100 metros.

 

Salvo Mariano Haro, alcanzando el “Diploma Olímpico” y Antonio Campos finalista en 3000 obstáculos, y los maratonianos que accedieron directamente a la final. El resto a pesar de algunas buenas marcas, fueron eliminados en las series previas de sus respectivas especialidad.

 

                                                                                                                                                      LA MEDALLA DE LOS JUEGOS DE MONTREAL

Campeones Olímpicos
100 metros lisos Hasely Crawfort 10,60 JAM
200 metros lisos Don Quarrie 20,23 JAM
400 metros lisos Alberto Juantorena 44,26 CUB
800 metros lisos Alberto Juantorena 1:45, 50 CUB
1500 metros lisos John Walker 3:39,17 AUS
5000 metros lisos Lasse Virén 13:24, 76 FIN
10000 metros lisos Lasse Virén 27:40,38 FIN
Marathón Waldemar Cierpinski 2h.12:19 GER
3000 obstáculos Anders Gärderud 8:08,02 SWE
Relevos 4 x 100 Equipo de USA 38,33 USA
Relevos 4 x 400 Equipo de USA 2:58,65 USA
     20 Klm. marcha Daniel Bautista 1h.24:40,6 MEX
110 metros vallas Guy Drut 13,30 FRA
400 metros vallas Edwin Moses 47,63 EUA
Salto de altura Jacek Wszola 2.25 POL
Salto de pértiga Tadeusz Slusarski 5.50 POL
Salto de longitud Clarence Robinson 8.35 EUA
Triple salto Víctor Saneyev 17.29 URS
Lanzamiento de peso Udo Bayer 21.05 GER
Lanzamiento de disco Maurice”Mac”Wilkins 67.50 EUA
Lanzamiento martillo Yuriy Sedykh 77.52 URS
Lanzamiento jabalina Miklos Németh 94.58 HUN
Decathlón Bruce Jenner 8617 p. USA
Campeonas Olímpicas
100 metros lisos Annegret Richter 11,08 GER
200 metros lisos Barbel Eckert 22,37 GER
400 metros lisos Irena Szewinska 49,29 POL
800 metros lisos Tatyana Kazánkina 1:54, 94 URS
1500 metros lisos Tatyana Kazánkina 4:05,5 URS
       100 metros vallas        Johanna Schaller 12,77 GER
Relevos 4 x 100 Equipo de GDR 42,33 GDR
Relevos 4 x 400 Equipo de GDR 3:19,23 GDR
Salto de altura Rosemarie Achermann 1.93 GER
Salto de longitud Angela Voigt 6.72 GDR
Lanzamiento de peso Ivanka Hristova 21.18 HUN
Lanzamiento de disco Elekin Schlaak 69.00 GDR
Lanzamiento jabalina Ruth Fuchs 65.94 GER
Pentathlón Siegrun Siegl 4777 p GDR

 

AMIK, LA EMBLEMÁTICA MASCOTA DE LOS JUEGOS 

                                                 El nombre de Amik, es como se conoce a un castor en lenguaje indígena, del cual su habitad natural son los lagos y ríos de Canadá.

     El nombre de Amik, es como se conoce a un castor en lenguaje indígena,

      del cual su habitad natural son los lagos y ríos de Canadá.

 

Fuentes de información:

Archivos de la Asociación Española de Estadísticos de Atletismo       AEEA

Búsqueda por Internet

Libros de la IAAF y de la Internacional Athletic Foundation

Archivos de la Real Federación Española de Atletismo  RFEA

Traducciones por Anna Martí

Documentación própia

 

Julio de 2012